hace muchos años, -que ya tengo una edad- me di cuenta que mis gustos y opiniones, más a menudo de lo que soy capaz de reconocer, van en dirección opuesta a la de la gran mayoría. no es que me quite el sueño, pero si alguna vez me hablas de algo que te apasiona y crees adividar en mi rostro una expresión de "me importa una castaña" es porque a mi eso que te encanta me trae sin cuidado o pienso totalmente lo opuesto. lo que pasa es que me callo, tampoco es plan de joderle la ilusión al personal. bueno, a veces no me callo para que mentir? y he aquí una de esas veces.
durante muchos años se han alzado a mi alrededor varias voces alabando una película llamada mi vecino totoro, quién no conoce la peli? sabía de su existencia pero no la había visto aún. hasta hace un par de días. soy reacia a embriagarme de la emoción que emana la gente que me rodea, pero a menudo me asaltaba el pensamiento de "mira que si muero sin haberla visto y resulta que era la peli de mi vida..." pues no, señores y señoras, mi vecino totoro no es la peli de mi vida. a raíz de hablera visto me asaltó otra duda "qué es eso que a todo el mundo le mola tanto de totoro y que yo no vi...?"
gente, totoro es una peli sobre una cría repelente que se encuentra a un ser mágico que vive al lado de su casa y que resulta ser un conejo gigante. luego está la hermana mayor, una niña que compagina el ser niña con substituír a la madre que está en el hospital a causa de un resfriado, yo creo que es cáncer y no nos lo quieren decir, rompería con la mágia de la historia. tenemos al padre que es un poco happy y la vecina, no mitológica, que cuida de todos ellos. y ya está, no tiene más, esa peli no contiene el secreto de la vida eterna ni te va a convertir en mejor persona. lo que pasa es que debe ser como políticamente incorrecto decir que no te mola totoro, entre el colectivo friki. debe ser como cagarse en la bandera -de forma figurada- dentro del ejército de cualquier país. ergo, esa peli no es para tanto, ni tansiquiera para pasar el rato. pero como a "todo el mundo" le mola, pues hay que comulgar con ese pensamiento. yo creo que en realidad no le mola a nadie y nunca lo descubriremos porque nadie se atreverá a decirlo.
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