indagando por ahí he encontrado en el mundo, la noticia que hace referencia a la idea de manuela carmena.
y lo que me resulta más gracioso es la cantidad de comentarios que hay, gente llevándose las manos a la cabeza y poniendo a parir a carmena. yo como normalmente pienso al revés de todo el mundo me he quedado medio alucinada con tanta chorrada suelta.
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| ~el mas mallol era uno de los edificios en los que se emplazaba el antiguo colegio~ |
cuando iba al cole, ese fantástico y estupendo colegio al que iba, el pax, hacíamos algo similar. si mal no recuerdo, los miércoles, dedicábamos los primeros cinco minutos del recreo a recoger 'suciedad' del suelo.
antes dejadme hacer una aclaración. los que no sabéis cómo era el recreo en mi cole, os voy a dejar un par de fotos, aunque ni así os podréis hacer jamás ni una mínima idea de cómo era:
nuestro espacio de recreo era un bosque, un inmenso bosque. bueno quizás no era tan inmenso, ya sabéis que cuando uno es pequeño todo parece más grande... en estas dos fotos, sacadas de la página de facebook "escola pax" podéis ver sólo una pequeña parte de nuestro bosque. era mucho, mucho más extenso.
pues bien, volvamos a lo que os he empezado a contar anteriormente.
en el pax no sólo nos enseñaban a sumar y a leer, también nos enseñaban otras cosas, una de ellas era la ética, el respeto, el civismo... no ensuciar fue una de las cosas que aprendí allí. pero siempre volaba un trozo de papel, el envoltorio de un caramelo, un cachito de papel de plata en el que venía envuelto nuestro bocata de media mañana. pues todo eso, se recogía los miércoles antes del recreo y luego a correr por ahí.
quizás sea por eso que la noticia no me parece una mala idea en absoluto. tampoco imagino a los padres de los alumnos rasgándose las vestiduras al saber qué hacíamos los miércoles antes del recreo.
dónde está el puto problema? que la mierda que puedan recoger los niños no la han generado ellos? vale. lo más probable es que lo hayan hecho sus padres, sus tíos, sus abuelos, o alguien a quien no conocen ni conocerán jamás. muy bien. pero si de pequeños se les hace entender que las cosas esas que hay por la calle llamadas papeleras sirven para lanzar la mierda, quizás el día de mañana tengamos unas calles más limpias, porque no sé en otras ciudades, pero en tarragona la gente es de un cerdo que tira para atrás.
tranquilos, nadie va a sufrir un trauma, os lo aseguro! la única secuela que dejó en mí esta práctica tan atroz es que nunca jamás en la vida he tirado nada al suelo, siempre busco una papelera y si no la hay, me guardo lo que sea que tenga que tirar y espero a encontrar una... también recojo las cacas de mis perros. porque con sólo cinco minutos a la semana, me enseñaron a respetar mi entorno. así que podéis dejar de alarmaros y hacer el ridículo.
