en definitiva, por fin acabé de leer la saga de david wellington y no me ha gustado nada! así como los tres de loureiro me engancharon completamente, estos se me han hecho eternos, personalmente no ha habido ni un momento que me tuviera en vilo, deseando empezar el siguiente capítulo. era como caminar por el desierto en pos de la visión de un oasis que nunca alcanzas... no es que haya estado jamás perdida en un desierto, y bueno, ni sin perder, pero vamos que en ningún momento he disfrutado de la lectura. recuerdo cuando empecé a leer el tercero, cuando lo abrí, antes de empezar tuve un lapsus, quise hacer memoria y no hubo manera, por un momento había olvidado qué sucedía en el primer libro, así de honda fue su huella...
zombies con consciencia, zombies que hablan, gatos zombies, palomas zombies, gente que se convierte en zombies por propia voluntad, como única vía de escape, momias, un tío pintado de azul, liches -que aún no sé qué son!- una fuente de luz y energía como orígen de toda la movida, la mujer enferma que llevó a su marido a construír esa fuente para poder mantenerla con vida y que en mi cabeza se asemejaba a la señora basura de los fraggle rock. no recuerdo una sola escena emocionante, me costaba la vida visualizar lo que estaba leyendo, a veces leía párrafos enteros y cuando los terminaba no era capaz de recordar lo que acababa de leer. no pasé miedo ni un sólo momento y lo único que me empujaba a seguir leyendo era la promesa de que algún día iba a terminar y así poder empezar otro.
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